Libia está situado en la ribera meridional del mar Mediterráneo, fronteriza al Oeste con Túnez y Argelia, al Sur con Nigeria, Chad y Sudán y al Este con Egipto. Su población es de 6,375 millones de habitantes, crece a un ritmo anual del 1.3% y posee un poder adquisitivo que asciende a los 7,998.03 dólares (2017).
La economía libia depende en gran parte de los recursos petroleros del país, puesto que, a diferencia de otros países vecinos como Marruecos o Egipto, el país carece de recursos agrícolas o una población considerable. Desde la guerra civil en 2011, el país ha enfrentado muchos obstáculos para reconstruir infraestructura que permita diversificar la economía. Se ha logrado que la producción de cemento, acero y hierro produzcan ganancias significativas para la economía. Se ha impulsado el desarrollo de zonas urbanas e industriales que ha mejorado la atracción de inversiones en el país.
Libia es un país con todo tipo de necesidades, existen muchas oportunidades en varios sectores ya que su desarrollo se debe a la inversión extranjera. Los principales sectores para inversiones son salud, transporte, construcción y modernización de aeropuertos y carreteras, industria eléctrica y química. Las exportaciones de electrodomésticos, alimentos procesados, equipo de transporte y material educativo es altamente potencial.
Principales productos de exportación: jugos de frutas, cementos dentales y llaves de ajuste.
Principales productos de importación: gorras y muelas y artículos símil.