La economía tunecina se encuentra entre las más competitivas a nivel mundial. La inversión privada y extranjera representó el 18.5% del PIB nacional. Debido a que no cuenta con una gran cantidad de recursos naturales, el país se ha enfocado a capacitar y mejorar el nivel de vida su capital humano, por lo que el gobierno ha incrementado su inversión en educación, salud, vivienda residencial y servicios públicos.
Se ha fomentado para que la inversión pública juegue un papel más activo, lo que ha resultado en una economía más moderna y diversificada. Con el plan de desarrollo Túnez 2020 el gobierno espera atraer más de 60 mil millones de USD para promover áreas como energía sustentable y construcción.
Túnez es el séptimo productor de fosfatos a nivel mundial y el 8vo. proveedor de prendas de vestir para la Unión Europea. Los sectores que buscan atraer inversión extranjera son textiles, tecnología para computación, servicios corporativos, energía y turismo. Las estrategias implementadas por el gobierno han dado un fuerte impulso a la industrialización de la economía nacional.
Principales productos de exportación: espato flúor, tractores, garbanzos, transmisores/receptores de voz y maquinaria.
Principales productos de importación: circuitos impresos, aeropartes, interruptores, válvulas para piparas y aparatos para la protección de circuitos.